Observado desde Escazú (C/2011 L4)

Ayer viernes 8 de marzo, el Colegio Blue Valley tuvo una actividad astronómica para sus estudiantes de sexto año, que inició a las 19 horas. La parte académica consistió de tres talleres: Cometas, Órbita de la Tierra y Google Sky Map (para tabletas), más una observación del cielo nocturno con binoculares y telescopio. La dirigimos dos amigos y yo, con la colaboración de maestros y unos padres de familia.

Dada la posibilidad de observar el Cometa PANSTARRS C/2011 L4, esperamos ansiosamente la llegada del viernes, junto con la incógnita del posible cielo nublado, como ocurrió en los días anteriores. Hubo un poco de lluvia como a las 4 de la tarde, pero ya desde las 5:30 p.m., el cielo del Oeste se despejo un poco, dejando una apropiada ventana alrededor del Sol poniente. Incluso las gotitas de agua sobre San José nos permitieron ver un arcoíris hacia el Este.

08/03/2013. 18:22. C/2011 L4  PANSTARRS.
Desde el Colegio Blue Valley.
Escazú, Costa Rica.

Junto con mis dos compañeros (Ronald y Marie), mientras mirábamos el cielo de reojo (evitando el Sol), fuimos armando los trípodes para colocarles binoculares de alta potencia (14x60, 16x70 y 25x100) para tratar de encontrar al elusivo cometa. El Sol se ocultó a las 17:47 (acimut 266 grados) en Aquarius y nos pintó el atardecer con los típicos colores del crepúsculo vespertino.
A las 18:10 comenzamos a observar en la dirección apropiada, así en sencillo y de manera empírica, como unos 10 grados (un puño) a la izquierda y hacia arriba del punto donde se ocultó el Sol.

Y a las 18:15 Ronald vio un objeto nuboso blancuzco, con una pequeña cola; era el cometa. Inmediatamente lo localizamos en los otros dos binoculares y allí estaba, pequeño y tímido medio escondiéndose entre el resplandor del Sol.
La observación no fue fácil, el cielo aún estaba muy claro con su tinte anaranjado, pero mantuvimos al visitante enfocado en los oculares como hasta las 18:32, cuando se ocultó tras los arboles de un cerrito bajo, unos 10 grados al Sur del Oeste.
Algunos profesores y estudiantes pudieron observarlo también.
Yo diría que no lo pude distinguir a simple vista, pero sí con la ayuda óptica.

Tomamos varias fotos, pero el cometa nunca lo ubiqué en la pantalla de la cámara, solo la región donde supuse que estaba. Viéndolas luego en la computadora si capté el cielo y la fila de árboles del horizonte, por donde estaba descendiendo. En tres de ellas se puede apenas apreciar la motita blanca, justo para mi recuerdo personal.
Voy a pedirle a uno de mis colegas, que aplique sus habilidades artísticas y que haga un dibujo basado en la fotografía.
Bueno, espero verlo hoy desde Caldera, en Puntarenas y definitivamente el martes 12, cuando un pequeño creciente lunar me ayude a ubicarlo.

Creo, sin embargo, que al estar siempre metido dentro del crepúsculo civil, en mi caso tendré que usar binoculares, a pesar de que el C/2011 L4 alcance una apropiada magnitud visual (quizás menor que cero).
Buena suerte para usted, le deseo buen tiempo y una observación a ojo desnudo.